Hafefobia: miedo a tocar y a ser tocado por Clínica Fuensalud

Hafefobia: miedo a tocar y a ser tocado

Hafefobia.

Muchas son las conductas que hemos tenido que modificar debido a la pandemia que estamos sufriendo debido al Coronavirus o Covid-19. Era habitual mostrar nuestro afecto o aprecio a otras personas y sobre todo a los más allegados, con un abrazo, con un beso o con un apretón de manos. Pero estos afectos los hemos tenido que modificar. Por precaución y para evitar el contagio, los hemos tenido que suprimir.

Si esto nos lo hubieran contado hace tiempo, hubiéramos dicho es imposible, pero si lo estamos haciendo, por nuestro bien y por el bien de las personas que más queremos. Legando incluso a modificar nuestro estilo de vida y nuestras conductas sociales.

Pero insisto, lo estamos haciendo por precaución. Pero cuando evitamos el contacto con otras personas por miedo, estamos hablando de una fobia.

Esta fobia a la que estoy haciendo referencia tiene el nombre de Hafefobia.

Seguramente nunca hayas oído hablar de esta fobia, pero debido a las circunstancias y a la situación actual está floreciendo de manera considerable en la población mundial.

El objetivo de este artículo es proporcionarte información sobre la Hafefobia. Explicarte cuáles son las causas que la desencadenan, los síntomas que produce y además indicarte cómo se puede tratar desde el punto de vista de la Psicología.

Quédate conmigo y descubre esto y muchas más cosas interesantes.

¡Comencemos!

¿Qué es la Hafefobia?

Como muy bien indica el título de este punto la Hafefobia, se puede definir como el miedo descontrolado y desmesurado de tocar o ser tocado por alguien, aunque sea conocido o allegado a nosotros.

Es un miedo que se considera irracional, es decir ilógico e incomprensible y que aparentemente no conlleva o no nos produce daño.

Pero hay personas que cuando sienten que van a ser tocados o se ven en la obligación de tocar, piensan que ven invadido su espacio vital o su espacio de seguridad.

Este tipo de fobias como la Hafefobia puede conllevar verdaderos problemas sociales, llegando a afectar a la vida cotidiana de una persona. E incluso podemos decir que puede conllevar al aislamiento social de la persona que lo padece.

Debido a la pandemia hemos tenido que extremar los cuidados de higiene y los contactos. Pero hay que decir, que cuando estos cuidados se llevan al extremo, pueden generar patologías, como por ejemplo la Hafefobia.

La Hafefobia es considerada una de las fobias más raras, ya que habitualmente no era muy frecuente que se diera entre la población. Pero debido al Coronavirus o Covid-19, los casos de Hafefobia se están disparando.

¿Qué diferencia hay, es miedo o es fobia?

Es importante decir que es fundamental saber diferenciar el miedo de una fobia, ya que son dos conceptos diferentes.

Se considera fobia cuando existe un trastorno generando síntomas como por ejemplo ansiedad, que hacen que la persona que lo padece vea limitado su rutina diaria.

Sin embargo, el miedo es una adaptación o aclimatación rápida ante una situación que puede presentar algún tipo de peligro.

Esta adaptación de la que estamos hablando del miedo es rápida y temporal, mientras que el caso de la fobia se mantiene en el tiempo que incluso puede llegar a perdurar durante mucho tiempo.

¿Cuáles son las causas del miedo a tocar y ser tocado?

Podemos decir que en general no existe un patrón o una predisposición concreta para padecer cualquier tipo de fobia.

Pero si que existen unos factores condicionantes que en cierto modo pueden hacer que la persona tenga cierta predisposición.

Estos factores a los que nos estamos haciendo referencia son los siguientes:

  • Haber estado sometido a una tensión o una presión desmesurada durante un tiempo prolongado.
  • En ocasiones cuando la persona ha estado expuesto a una situación compleja durante un tiempo, le puede haber causado un trauma llegando a afectar a su salud mental.
  • Por otro lado, otra de las causas es tener de base o padecer algún tipo de patologías de nuestro Sistema Psíquico.
  • Y sin duda alguna hay personas que ante la pandemia mundial que estamos sufriendo no ha sabido gestionar de manera correcta todos los pensamientos y sentimientos que nos pueden pasar a cada uno de nosotros por nuestra cabeza.

Hafefobia: especial atención a los niños y a los ancianos

En el punto anterior hemos comentado que no existe un patrón o una horquilla de edad para determinar quién puede padecer una fobia.

En el caso de la Hafefobia, debemos tener o prestar especial atención a los más pequeños de la casa y a nuestras personas mayores.

Pero seguramente os estéis preguntado por qué.

Pues bien, la respuesta es muy sencilla.

Niños.

En el caso de los niños debemos estar muy atentos y tener activos nuestros radares de padres en todo momento. Hay que tener en cuenta que los niños están en un momento de total y completa expansión tanto física como mental.

Debido a la situación actual se están desarrollando en un entorno que no es normal, ya que no están en contacto con otros niños, excepto cuando están en el colegio. Pero no se relacionan con otros niños fuera del ámbito escolar.

Por otro lado, estamos constantemente diciéndoles que deben mantener la distancia y recalcamos el uso de la mascarilla y el lavado de manos constantes.

Todas estas limitaciones o toda situación inusual, pueden hacer que el niño o la niña sienta cierto ahogo o cierto miedo, llegando a generar en ellos cierta inestabilidad en su desarrollo vital y natural.

Por lo tanto, los padres debemos estar atentos ante cualquier situación de alarma. Pero además es importante proporcionales otras vías de escape con la que ellos puedan expresar sus sentimientos o sus miedos sin el temor a tocar o ser tocados.

Es fundamental explicarles correctamente y de una manera adecuada a la edad de cada uno cuándo deben tener este contacto físico y cuando no deben porque puede suponer un peligro.

Del mismo modo, otro consejo que propongo a los padres es que se intensifique en el entorno familiar los gestos de cariño, para que el niño o la niña no sienta ese vacío.

Personas mayores y ancianas.

Por otro lado, en el caso de las personas mayores o ancianos su aislamiento social se produce por la protección que deben y que debemos proporcionales para evitar el contagio y por lo tanto un desenlace trágico.

Debido a ello han dejado de salir, de tener contacto con otras personas de su edad o de su entorno. También han tenido que renunciar a realizar aquellas actividades de ocio que hacían habitualmente. Se han visto obligados a cambiar por completo su vida y su rutina diaria.

Tanto aislamiento debido al Coronavirus por supuesto que le afecta a su salud mental, y en ocasiones se ven inmersos en una soledad total y absoluta.

Por ello mi recomendación es estar muy atentos a situaciones inusuales. Ya sabemos que no podemos tener contacto con nuestros mayores, pero afortunadamente vivimos en la era de la tecnología. Podemos enseñarles a utilizar por ejemplo el móvil para poder hacer videollamadas y tener contacto alguno (aunque sea a través de una pantalla) con sus seres queridos o simplemente con sus amistades.

Síntomas de la Hafefobia

Los síntomas que se sufre debido a esta fobia no van aparecer de manera brusca, si no que se van a ir instaurando de manera progresiva y paulatina en nuestra forma de actuar y de relacionarnos.

Los síntomas que va a desencadenar la Hafefobia pueden afectar a varios a campos a áreas de la persona que lo sufre. Estos campos a áreas a los que estamos haciendo referencia son los siguientes:

  • ÁREA COGNITIVA. Cuando se ve afectado en este campo el paciente siente y comienza a tener pensamientos o ideas negativas y catastróficos por el hecho de pensar que debe tocar a alguien o bien que cualquier otra persona puede invadir su espacio de confort o vital.

Es por ello que los síntomas que desencadena esta área son los siguientes:

  • Angustia
  • Ansiedad
  • Nerviosismo
  • Falta o pérdida de concentración.
  • Miedo
  • Pánico.
  • Se envuelve en pensamientos negativos por el contacto. Llegando incluso a pensar en la posibilidad de morir porque alguien le toque o le roce.
  • Sensación de falta de aire.
  • ÁREA FÍSIOLÓGICA. En este campo los síntomas que experimenta el paciente van a afectar a nivel físico. Por lo tanto, los síntomas que aparecen son los siguientes:

– Dolor de cabeza.

– Taquicardias.

– Sensación de ahogo.

– Temblor.

– Dolor de estómago.

– Mareos.

– Náuseas.

– Vómitos.

  • ÁREA CONDUCTUAL. Cuando la Hafefobia afecta a esta área, todos los síntomas que se desencadenan son para rehuir o alejarse de todo aquello que lleve implícito el contacto. Es decir, se huye del estímulo, del contacto.

Psicología para la Hafefobia

Hay que decir y tranquilizar al lector que la Hafefobia es una patología que con un tratamiento correcto y como cualquier otra fobia, tiene solución y por lo tanto cura.

Para que el tratamiento de Psicología sea realmente fructífero, el terapeuta debe realizar un buen diagnóstico y observar no sólo los síntomas que describe el paciente, si no que cuando realice el diagnóstico debe averiguar el origen o la causa que ha llevado al paciente a desarrollar la Hafefobia o ese miedo a tener que tocar y ser tocado.

Parece algo complicado, pero os puedo asegurar que se consigue.

En el punto anterior hemos ido desglosando los síntomas que se puede padecer o sufrir con la Hafefobia.

Áreas de tratamiento:

Pues bien, ahora os voy a comentar cómo actúa la Psicología en cada uno de las áreas y el objetivo que debe conseguir.

  • ÁREA COGNITIVA. El objetivo que se debe conseguir en este campo es eliminar los pensamientos negativos del paciente, para poder controlar los miedos.
  • ÁREA FISIOLÓGICA. Se debe enseñar al paciente la forma de controlar todos los síntomas que se desencadenan en este campo. Esto se va a conseguir enseñándole varias técnicas que deben ir adecuadas a cada paciente.
  • ÁREA CONDUCTUAL. Se debe hacer ver al paciente que no existe riesgo alguno si tiene contacto con las personas que son más allegadas para él o para ella. Para ello se debe ir exponiendo de manera gradual al estímulo, es decir, al contacto.

Para poder conseguir estos objetivos la Psicología puede hacer uso de la Terapia cognitivo-conductual. Se ha demostrado que esta terapia es realmente efectiva para este tipo de casos. Pero eso no significa que sea la única, existen otras terapias. Pero la elección de una u otra, va a depender de cada caso y del grado de gravedad.

Por lo tanto, podemos decir que en general todos estos objetivos deben ir encaminados o focalizados a conseguir que el paciente pueda vencer el miedo o el pánico a un posible contacto físico con otra persona, para mejorar su calidad de vida y conseguir salir de ese aislamiento social que posee.

Tratamiento.

De este modo la Psicología tratará de:

  • Relajar esa sobreestimulación que el paciente ejerce sobre su sistema nervioso. Para conseguir esto se le enseñará al paciente técnicas de relajación y/o meditación.
  • Se trabajará sobre todos aquellos pensamientos negativos y catastrofista que posee, por ello se le intentará dar al paciente una visión más apropiada de la realidad.
  • Y por último es muy importante ir exponiendo al paciente de una manera gradual a todo lo que le provoca esta patología, que es el contacto físico con las personas. De este modo el paciente podrá recuperar una buena calidad de vida.

RESUMEN

La pandemia que estamos sufriendo verdaderamente huella en todos nosotros. Y sobre todo está afectando a la salud mental de muchas personas.

Hemos tenido que modificar una multitud de gestos y cosas que hacíamos antes para evitar contagiar y ser contagiados.

Una de estas cosas que hemos modificado y que por nuestro bien y el bien de todos los que nos rodean es evitar dar los añorados besos, abrazos y gestos de aprecio y de cariño.

Cuando la evitación de este contacto se hace patológico y prolongado en el tiempo podemos decir que estamos ante una patología llamada Hafefobia o miedo a tocar y a ser tocado.

La Hafefobia es una fobia que no es muy común, pero que en los tiempos que estamos se está haciendo más visible en las consultas de Psicología.

La persona que lo padece presenta una sintomatología que le lleva a sentir verdadero pánico al contacto, aunque sea de sus seres más cercanos. Esta evitación al contacto puede llevarlos a un aislamiento social completo y por lo tanto modificando su calidad de vida.

La Hafefobia se puede curar siguiendo un adecuado tratamiento de Psicología.

Vence la Hafefobia y recupera tu bienestar.

Clínica Fuensalud, Departamento de Psicología

ENLACES DE INTERÉS

Asociación Española de Psicología Clínica Cognitivo Conductual (AEPCCC)

Asociación Española de Ayuda Mutua contra Fobia Social y Trastornos de Ansiedad (AMTAES)

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